¿Sabes tú, vecino, de cuántos muertos hablarán mañana?
Dime, ¿cuántos hacen falta para hacernos vomitar?
Dime si apenas te importa que todo siga igual.
Dime si apenas te importa.
Dime lo que ya sabemos y no queremos ver,
dímelo hasta que me importe y no me deje comer,
dime lo que ya sabemos.
Que no hay agua pal sediento,
que no hay paz pa quien la anhela,
que no hay sombra, que no hay pan,
que no hay techo ni trabajo
en esta casa cristiana,