Todo hombre que se precie tiene que imponer respeto:
escuchar, hablar, tener dinero, celular, ser bueno en la cama, y respetarte.
Si el hombre no tiene ninguna de estas virtudes, alejarse y tomar medidas.
Porque el hombre real... Él te ama, te ama, te trata con respecto y amor,
y te dará toda la vida grandes felicidades;
serán felices: este es el hombre de verdad.