Ojala que me despierte y no busque razones.
Ojala que empezara de cero,
y poderle decir que
he pasado la vida
sin saber que la espero, no.
Como un extraterrestre se posa en el suelo
y me ofrece regalos que trae de otros cielos.
Le regalo una piedra
recuerdo de la Tierra.
Me pregunta por qué el hombre inventó la guerra.
Y en silencio pregunta aún de cosas más serias.
Yo me pongo palote
sólo con que me toque.