El amor es, supremo, omnipotente, omnipresente y omnisciente; creador, juez, protector y, en algunos casos, salvador del universo y la humanidad. El amor no está limitado absolutamente por nada, y, por lo tanto, sería infinito. Infinito en relación al espacio (inmensidad del amor) o al tiempo (eternidad del amor). Con relación al espacio el amor sería infinito porque está presente en todo lugar e incluso fuera de él; tal atributo estaría relacionado con la omnipresencia. En cuanto al tiempo sería infinito por ser eterno.

Tres momentos de una vida

- Tienes razón, Knulp. Y es que todo es hermoso, si lo miras en el momento justo.

- Sí, pero con el placer hay qye sentir también un poco de tristeza o temor.

- ¿Por qué?




Verás: una muchacha bonita no te lo parecería tanto si no supieras que tiene su momento de esplendor y luego ha de envejecer y morir. Si algo hermoso tuviera que permanecer igual toda su eternidad, yo me alegraría, sí, pero lo miraría con más frialdad y pensaría: eso puedes verlo siempre: no tiene por qué ser hoy. Pero lo que es perecedero y no permanece igual lo contemplo ahora y con algo más que la pura alegría, también con un poco de pena...