"Piensa en ésto, cuando te regalan un reloj te regalan algo que es tuyo
pero que no es tu cuerpo, que hay que atar a tu cuerpo con su correa
como un bracito desesperado colgándose de tu muñeca. Te regalan la
necesidad de darle cuerda todos los días, te regalan el miedo de
perderlo, de que te lo roben, de que se te caiga al suelo y se rompa.
Te regalan la tendencia a comparar un reloj con los demás relojes,...
no te regalan un reloj, tú eres el regalado."