El amor es, supremo, omnipotente, omnipresente y omnisciente; creador, juez, protector y, en algunos casos, salvador del universo y la humanidad. El amor no está limitado absolutamente por nada, y, por lo tanto, sería infinito. Infinito en relación al espacio (inmensidad del amor) o al tiempo (eternidad del amor). Con relación al espacio el amor sería infinito porque está presente en todo lugar e incluso fuera de él; tal atributo estaría relacionado con la omnipresencia. En cuanto al tiempo sería infinito por ser eterno.

Severino Di Giovanni

“...Perdernos entre el verdor, lejos, lejos... caminar del brazo en esta aurora hacia un horizonte intangible e inalcanzable, siempre unidos, siempre fuertemente ligados como dos hiedras sorbiéndonos la propia existencia una de la otra, y cantar la rapsodia heroica de la vida difícil.”